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K-Style
El K-style es un tipo especial de jugador de videojuegos que se caracteriza por su grandiosa capacidad para mimetizar los movimientos y técnicas de garrotas excesivamente ególatras y/o frikis para resistirse a grabarse a si mismos en video y colgar su obra por internet de donde el K-Style player obtiene sus conocimientos profanos. Cabe mencionar que el 65% de los casos el ególatra es un coreano, de donde proviene el nombre (K de Corea, ¿no era evidente?), el resto vienen siendo japoneses, lo cual no es especialmente sorprendente dada la rivalidad intrínseca de ambas nacionalidades y su frikismo enfermizo. Los K-Style por contra tienden a ser de todas las nacionalidades habidas y por haber (o al menos de todas las que tienen acceso a Interné).
El K-Style carece por completo de personalidad, fingiendo garrotear cuando realmente solo sabe aporrear el teclado y el ratón con pautas erráticas que tienden a asimilarse a las del ultimo video que vio por youtube, lo que los convierte en enemigos temibles para cualquier novato que no comprende con exactitud que demonios hace el sujeto en cuestión ni comprende como ha saltado un muro de diez metros de alto de un único salto. Son extremadamente prolíferos en los Shooters, los juegos de estrategia y en los MOPRPGS, donde no basta con humillar al adversario, si encima puedes grabarlo en video puedes recordárselo por siempre y enseñárselo a los amigos. Los K-Style tienen la extraña y sobrenatural habilidad de absorber la arrogancia del garrota original (y en rara ocasión su talento fruto de horas semanas de juego incesante) debido a lo cual tienden a considerar noobs a todo lo que se mueve, inclusive alguien que consiga matarlos. Casualmente su enemigo acérrimo son los verdaderos garrotas, quienes siempre están dispuestos a bajar del pedestal a los imitadores y encuentran la caza de K-Style un hobby especialmente gratificante (especialmente los garrota no coreanos quienes no comprenden tanta puñetera imitación de los coreanos y podrían ponerse solamente en su lugar si los imitasen a ellos, cosa que no ocurre para su irritación).
Aunque la mayoría de K-Style sigue siendo un K-Style toda su vida unos pocos consiguen arrepentirse de ello volviendo a ser gamers normales y molientes, principalmente por carecer de las habilidades necesarias para una adecuada mimetización. Una minoría reducida consigue convertirse en garrotas, no se sabe muy bien si clones del original o verdaderos entes individuales. Y finalmente algunos caen en el viaje al reverso oscuro convirtiéndose en Chetos.