Usuario:Crystal

Soy el mas chevere de todos. Mi nombre se debe a que estaba escuchando la canción "Crystal ball" de Keane al momento de registrarme en la frikipedia, lo que unido a mi alta carga de THC hizo que me ponga ese nick aunque ahora me doy cuenta que suena un poco gay por lo que para demostrar que soy macho y me las aguanto todas no voy a cambiarme de nick.

Biografía

Nací en una familia bien acomodada (en la pobreza). Yo soy el hermano mayor (el otro es sargento y los otros son apenas soldados razos).

Siempre fui el primero en mi clase (¿será porque era el primero de la lista?), mis calificaciones eran extraordinarias (siempre me llevaba todas las materias a exámenes extraordinarios). Es más, mi libreta fue la primera en decimales. ¿Como estaría de mal que eran siete materias y reprobraba diez? Aun así me gradué con honores... si con Honores, Dolores, Leonores y demás compañeras de curso.

Luego del colegio, siendo un jóven guapo, inteligente... ¡y sobretodo modesto! decidí trabajar con mi tío Casimiro (un tío muy viejo que nunca tuvo hijos, tan solo catorce nietos), manejando un bus urbano. El primer día me subí a las veredas y choqué el bus. Pero mi tío me dijo que lo haga con empeño y lo haré mejor: Que talvez en el futuro quizas tumbe un puesto de frutas o atropelle a unos peatones... Así que me da ganas de seguir apretando el acelerador.

Me gusta leer un libro titulado "Memorias de un hombre con Alzhaimer", es super interesante, sobretodo en esa parte en que el autor se olvida de como escribir y hay como 75 páginas en blanco. Otros libros del mismo autor son: Los caballeros no tenemos memoria; y la novela romántica que escribió: ¿De que manera te olvido?

Actualmente me dedico a la filosofía y al narcotráfico, llevo drogas y por eso creo en la transmutación del alma y tengo un amigo imaginario que se llama Demiurgo. De preferencia por jovencitas, sin perjuicio de viejas y niñas menores de edad, profeso mi religión con flexibilidad, aunque ahora ya me nombraron condestable de la Internacional Orden de Toledo, solo que no la pasamos en Toledo sino en cualquier otra parte.

En fin, la historia de mi vida es como un cuento de hadas: Como el del lobo y los tres cerditos... solo que sin lobo ni tres cerditos.