Fido Dido

Fido Dido, cuando ya no le quedaba ni pa taxis

Fido Dido es el monchín mascota de una bebida bastante rancia y cuya principal cualidad era que era rancia, llamada 7up, tildada por los de chiste fácil como Semenap. Es lo que cogemos en el Mercadona cuando nos apetece líquido con burbujas, nos faltan 2 céntimos para alcanzar el ansiado Kas naranja y no nos rebajamos a que la gente nos vea por la calle con una lata de Rally cola de Hacendado (faltaría más).

Se caracteriza por ser un monchín bastante genérico y sin gracia, de apático cae antipático y está condenado a muerte en doce paises.

No confundir con Comedido, que es Dios.

Origenes

Fido Dido nació en un barrio pobre de Wisconsin, en los USA,su madre era Dido(ex-cantante de metal folk de Cartago) y tuvo una infancia difícil, sus compañeros le pegaban y sus profesores también. Luego creció y empezó a beber sin parar. Acabó en la cárcel por atraco a mano armada y en uno de los programas de rehabilitación le obligaron a regalar su imagen a una compañía de bebidas rancias.

La Semenap

Esta compañía era en realidad una tapadera para la productora de bazofias mediocres de Christopher Lambert, y consiguió un éxito relativo al introducir marihuana en la bebida, lo que le daba ese toque verdoso a la botella. De ahí que se explique como una bebida tan lamentable tuviera un éxito moderado, y trataron de lanzar a Fido Dido al estrellato, a codearse con la alta sociedad. Pero era tan soso que nadie le hacía caso. Fido Dido aprovechó que su situación económica mejoraba para abandonar el onanismo y satisfacer su lujuria. Protagonizó varios escándalos y finalmente se echó a perder cuando la 7up perdió las ventas debido a que los Machos Dominantes atacaron la plantación y se pegaron la gran fumada.

Caida en desgracia

La popularidad de Fido Dido se debía a la drogadicción de la población, así que cuando cayó la Semenap, Fido Dido cayó en el más profundo de los olvidos, pues era tan soso como la bebida que promocionaba. Gastó su dinero en chaperos, alcohol y drogas adulteradas, y para salir adelante se sometió a varios experimentos con medicamentos alternativos, lo que le ha causado cierta apoplejía. Malas lenguas dicen que se echó a la prostitución callejera.

Hoy en día Fido Dido sigue olvidado.