![]() |
Está en marcha el XXI Certamen de Adopción. Entra y vota tu artículo favorito en esta página |
![]() |
Furcio
Dícese del marsupial o mamífero (especie desconocida) que puede reaccionar con salvajismo si éste siente que lo están ofendiendo, de carácter sensible y tímido ante el público, aunque en confianza es hostil.
Características físicas
- Parece tener una especie de minijoroba, por lo que se cree que pertenece la familia de los dromedarios, aunque sus orejas grandes y caídas delatan un parentesco con los sabuesos.
- Su sentido de la orientación es muy malo, característico de que si se le deja solo en el tec, suele perderse y llegar tarde a clase de Justino hasta 3 días.
- Puede estar perdido, por lo general se le suele ver acompañado de otra especie, un oso grande de color blanco, el cual responde al nombre de Bimbo (se dice que el animal que responde al nombre de furcio carece de la capacidad de hablar en público, por eso usa como medio a Bimbo para que lo haga por él)
- Incapaz de poder conseguir comida por sí solo, debe de recurrir a la costumbre de conseguir dueño que le proporcione techo y comida. Poseedor de la costumbre gatuna de que si le das de comer una vez, siempre volverá a por más; aunque también si se le ofende una vez, puede reaccionar de manera hostil y abandonar su techo para buscar un nuevo amo.
Historias sobre el furcio

Historias de moradores cercanos a él cuentan que a esta especie rara y misteriosa le gusta hacer ritos satánicos donde involucra cochinos, los cuales son sacrificados en lo que se cree es un ritual para el rejuvenecimiento donde el furcio toma la sangre de estos animales y se baña en ella. Después de eso, combina la sangre con su leche y se la bebe, lo que se dice le da fuerza sobre el animal, aunque reduce su inteligencia. Después de haber completado el rito, el furcio toma la cabeza del cochino y la clava en una estaca, la cual después será colocada alrededor de su casa como señal a los extraños de que ese es su territorio y que no deben acercarse. Cuenta la leyenda que el furcio vive al otro lado del mundo donde no hay luz y por donde no pasó Dios cerca del fin del mundo, y que si te caes es porque ya te pasaste. Para atraer a los cochinos hasta ese lugar tan alejado de la civilización, el furcio por lo general suele ponerse feromonas porcinas para así atraer a los cochinos, los cuales inocentemente acuden al lugar pensando que encontrarán algo lindo, pero al llegar son recibidos por el furcio, el cual los espera con su cuchillo en la mano y pasa su filo por su lengua para saborear la sangre del cochino y en señal a este de lo que le espera.
![]() ![]() |
Antropología y Evolución
Rarezas biológicas inclasificables
Portal
|